Qué es un test de usabilidad con personas usuarias

Un test de usabilidad con personas usuarias consiste en encomendar una serie de tareas a una muestra de usuarios de la aplicación. Tanto las tareas como los usuarios se escogen en función de los resultados de la fase de análisis.

Estos test se pueden realizar en campo, en remoto o en un laboratorio de usabilidad.

La prueba se realiza en un entorno controlado donde se monitoriza la actividad de los usuarios sobre la aplicación y (opcionalmente) se graba en video la sesión. Este material es analizado después por expertos en UX para detectar problemas de usabilidad más sutiles que pudieron no manifestarse en la fase de conceptualización y, a su vez, se contrastan los problemas que sí se detectaron.

Habitualmente, las sesiones comienzan con una entrevista previa que sirve para conocer el perfil del usuario y sus conocimientos sobre la aplicación que va a analizar.

Posteriormente se les entrega una lista de tareas a realizar que han sido específicamente diseñadas para confirmar y profundizar en los problemas de usabilidad detectados en la evaluación heurística. Estas tareas se basan en las acciones definidas en el análisis de objetivos para cada tipo de usuario.

Uno o varios evaluadores observan la actividad del usuario, toman notas y asisten al usuario en lo que pueda necesitar. La sesión es monitorizada y registrada (previa autorización por escrito) tanto en audio como en video para su posterior análisis y evaluación.

Una vez completadas las tareas se realiza una entrevista final y se le entrega un cuestionario de satisfacción.

Habitualmente, el entregable de este test consiste en un Informe de incidencias detectadas. Un documento en el que se detallan las incidencias detectadas clasificadas por su gravedad. Así como un resumen ejecutivo con las conclusiones principales.

¿Con cuántos usuarios es necesario testear?

Algunas personas piensan que los test con usuarios son pruebas muy costosas y complejas que sólo se pueden realizar en proyectos de gran presupuesto. Nada más lejos de la realidad. El gurú de la usabilidad Jakob Nielsen y el investigador Tom Landauer probaron científicamente ya en 1993 que los mejores resultados provienen de probar con no más de 5 usuarios.

Como puede verse en esta gráfica publicada por Jakob Nielsen en el artículo “Why You Only Need to Test with 5 Users” en el año 2000, a medida que se agregan más usuarios, se aprende menos porque los problemas encontrados se irán repitiendo cada vez con mayor frecuencia.

La gráfica muestra que con 15 usuarios logramos detectar el 100% de los problemas de usabilidad. Sin embargo, Jakob Nielsen recomienda limitarse a 5 usuarios para optimizar el ratio de coste-beneficio. De hecho, 3 usuarios serían suficientes para detectar más de la mitad de los problemas.

Con 5 usuarios habremos detectado el 85% de los problemas de usabilidad. Una vez implementada una posible solución a los problemas detectados, se recomienda realizar otro estudio de usabilidad para corroborarlo. De nuevo con 5 usuarios. Es decir, se obtiene un mejor ratio de coste-beneficio realizando 3 estudios de usabilidad con 5 usuarios que un único estudio con 15 usuarios.

Cuándo probar con más usuarios

Hay algunas circunstancias especiales en las que se justifica recurrir a más de 5 usuarios.

La aplicación tiene varios grupos de usuarios muy distintos

Pongamos por caso que queremos analizar un comercio electrónico de neumáticos destinado tanto a usuarios particulares como a profesionales (talleres mecánicos, distribuidores, etc.). En ese caso sería recomendable seleccionar al menos 3 usuarios de cada tipo.

Estudios cuantitativos

Un test de usuarios es una prueba de tipo cualitativo. Si lo que queremos es comprobar hipótesis de tipo cuantitativo deberemos recurrir al menos a 20 usuarios.

Card sorting

Para un card sorting se recomiendan al menos 15 usuarios.

Eyetraking

Para obtener mapas de calor significativos este tipo de pruebas requieren de al menos 39 usuarios.